Perfil – Un hombre del deporte en la duma Departamental

Por: Guillermo Zuluaga

Ocurrió una tarde de brisa y verano, cuya fecha está perdida en los recovecos de la desmemoria. El  chico regresó a casa de la abuela, pintando en su rostro infantil una gran sonrisa. Y no era para menos: traía en sus manos unaUn hombre del deporte en la duma Departamental pelota que se había encontrado en el camino y no veía la hora de irse a jugar al patio. Pero bastó que su abuela lo notara, para mandarlo de casa en casa  de los vecinos a buscar el dueño de la pelota y devolverla.

Cuando Santiago Manuel Martínez habla del asunto, sabe que no está  hablando de su relación con el deporte; y  bastan dos minutos para que el hombre pele una lustrosa sonrisa y le haga caer en cuenta a su interlocutor que le está hablando de temas más profundos.

“Ese día, gracias a mi abuela tuve mi primera clase de Ética”.

El popular Santy Martínez nació en Corozal, Sucre y desde bien joven se vino a Medellín con sus sueños y muy pocas cosas en una caja de cartón.

Luego, estudió  becado.  Se graduó; se dedicó  a la docencia, pero prefirió la magia de la radio y pronto se olvidó de la tiza y el tablero y se dedicó a los medios de comunicación, los cuales lo habían seducido desde muy joven cuando incursionó, con su voz filosa y tropical, en la programación de música vallenata. La suya, la de su tierra Caribe.

A  finales de los años ochenta ese reconocimiento en la radio le permitió  incursionar en la política: fue concejal de Medellín, donde además fue Presidente de la corporación en dos periodos. De su paso por el Cabildo Municipal destaca algunos resultados como los Acuerdos para la creación de “Buen Comienzo”, con el fin de promover el desarrollo integral, diverso e influyente  de los niños y niñas  menores de  seis años en Medellín; el acuerdo que destinó recursos del Presupuesto Participativo para el incremento de oportunidades de educación superior; la ampliación del Programa de atención en Salud Oral escolar para los alumnos de las escuelas oficiales de Medellín; la institucionalización del programa “Vida después de la Vida” para la sensibilización y gestión que incremente la donación de órganos, tejidos y médula ósea en Medellín; la ampliación del Programa Sonrisa Saludable para los alumnos de los establecimientos oficiales de Medellín.

El Santy Martínez entiende  su labor como la posibilidad de “ayudar a reducir la inequidad y  que esto conduzca a la felicidad”.  Con esa mirada llegó en 2015 a la Asamblea de Antioquia y en noviembre de 2017  fue elegido por unanimidad de sus compañeros presidente de la principal Asamblea de Colombia.

Durante este periodo, el cual Santy Martínez ha presidido, la Asamblea de Antioquia ha aprobado ordenanzas para la creación de Provincias en Antioquia, con lo cual se contribuye al proceso de  descentralización administrativa; así mismo, ha apoyado a la Gobernación de Antioquia aprobando la utilización de vigencias futuras para destinar recursos para vías y proyectos sociales en Antioquia. Y como una de sus inquietudes principales es la educación, prepara un gran foro con invitados nacionales e internacionales, durante el próximo semestre.

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El político que anda con los guayos en el carro

Si bien los últimos años de su vida los ha dedicado en gran parte a las labores propias de la actividad política, el nombre de Santy Martínez se asocia más a las lides deportivas. De hecho, el  primer gran anhelo de este jugador de beisbol y de fútbol en el colegio, fue enrolarse en las filas del Deportivo Independiente Medellín, equipo al que le hipotecó su corazón; se probó y no tuvo tanta suerte, pero no por ello  ha dejado de practicar y a cualquier respiro que le dan sus reuniones, le pide a su conductor que lo lleve a la cancha donde se calza unos guayos que nunca faltan en la maleta del carro, y se pone a jugar como si estuviera en las sabanas de Sucre.

Además de practicarlo, este dirigente –como diría Gabo:  también “ha vivido para contarlo”. El Santy ha cumplido las labores propias del periodista deportivo: conoce de los olores ásperos  del  sudor y el linimento, pues fue “camerinero”; luego cubrió “entrenos”  de los equipos y gracias a su constancia y don de gentes tuvo la fortuna de acompañar a la Selección Colombia a tres mundiales, como comentarista enviado de una cadena radial. Además, su pasión por las letras y el deporte también las ha vertido como ocasional columnista deportivo.

Y como dirigente, Santy sabe que el deporte es el mejor camino para construir mejores personas, por lo que desde el Concejo lideró el Programa “Los escenarios son de todos”, que busca cultura ciudadana en los escenarios deportivos de Medellín, entre otros. Y ahora, como Diputado, es uno de los impulsores de la construcción de ciclorrutas en el departamento y lidera  el proyecto de Ordenanza para destacar al Deportista de Antioquia,  para enaltecer el esfuerzo y la disciplina de nuestros atletas del departamento.

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