Qatar 2022 – Día 1. Que no sea como la vida misma
Por Julián Ochoa
Agencia Informativa Acord Antioquia
Más estúpido que la norma del fuera de lugar del milímetro cuando todos corren y nadie está de “güevero”, es estúpida la falta de cuestionamiento general ante este capricho “matafútbol” que desafía toda lógica.
Cuando la norma avanza por encima del sentido que la creó -evitar que un jugador ventajoso “deambule cerca del arquero tomando ventaja- no solo conduce a la hipertrofia regulatoria, sino que mina la capacidad crítica, el sentido común, el espíritu y la intención del juego, descargando en el virtuoso una falta y una culpa que, en realidad, no tiene.
Ser castigado por hacer bien las cosas. Ser penado con la pérdida de lo ganado -el gol- por una errónea exégesis llevada al extremo de rebuscar herramientas tecnológicas, se abre la puerta para que el abuso de la norma sea dogma y el criterio de buen juicio desaparezca.
Porque el fútbol no tiene que ser tan injusto como la vida misma.
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