Colombia, la tierra de…
Por: Santiago Rendón
Agencia Informativa Acord Antioquia
El día 3 del Posgrado Internacional de Periodismo Deportivo, realizado en La Habana (Cuba), me hizo ahondar en la necesidad imperiosa que tenemos los colombianos por difundir los mensajes que representan lo que realmente es nuestro país, mucho más cuando estamos inmersos en los medios de comunicación.
Un día antes, uno de mis colegas extranjeros me comentó sobre la respuesta airada y enojada de un amigo suyo colombiano cuando él le preguntó: “¿Entonces vos sos de la Colombia de Pablo Escobar?”.
Mi primera reacción fue reírme, pues no es una situación ajena a mí, ni a ningún otro colombiano cuando sale del país. Pero, en un segundo momento, le hice ver que la culpa no es del extranjero por pensar así, sino de los medios de comunicación locales que siguen vendiendo la idea de que lo único que Colombia tiene para exportar es delincuencia, o que el mal que nos fue destruyendo por dentro durante décadas aún existe.
Y claro que aún existe, todavía es un peso con el que debemos cargar; pero, Colombia es mucho más que eso. Hoy debíamos exponer algunos conceptos básicos sobre cómo funciona el periodismo deportivo en nuestros países -partiendo del contexto general de nuestra nación-, y yo decidí titular mi presentación: “Colombia, la tierra de…”
Si le das a un foráneo la posibilidad de complementar el título, ya sabemos todos a quién hará referencia. Pero es mejor referirse a la Colombia que es tierra de más de 50 millones de habitantes, del 60% de los páramos en el mundo y de una biodiversidad que solo es superada por países tan inmensos como lo es Brasil.
Es más gratificante hablar de la Colombia de Gabriel García Márquez, el eterno Nobel que se declaró “un periodista, fundamentalmente”, y que supo añadir los elementos más propios de la narración literaria a sus novelas, las cuales no eran más que los compilados de sus vivencias contadas con el uso más riguroso de la investigación.
Es más honroso hablar de la Colombia de las 5 medallas de oro en Juegos Olímpicos, la que frecuentemente deslumbra con una nueva camada de deportistas y la que sigue transpirando fútbol, así la pelota en masculino cada vez sea un negocio más alejado de los aficionados y el balón para las mujeres siga negado, aunque estén destinadas a darnos más alegrías que sus colegas del sexo contrario.
En fin, de eso hablé y de eso quiero invitarlos a hablar. Porque este país ha sido resiliente por décadas buscando escribir una nueva historia y nosotros somos los encargados de llevar ese mensaje a cada rincón del mundo, hasta que cada que el tema entre en la mesa, todo el mundo hable de la Colombia de los colombianos.
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