Ancizar Correa y el arte de enseñar Taekwondo con los pies
Por: Jose Daniel Acevedo
Juegos Nacionales Universitarios Pereira 1991, final del Taekwondo en los 68kg y Ancizar la recuerda muy bien. “Le gané a la casa, el pelao’ era favorito y yo, pues más o menos me iba dando a conocer a nivel nacional, recuerdo que en el primer round le conecté varias patadas y solo me valieron una. Para el segundo round supe que tenía que salir con toda”.
Ancizar Correa, quien a los 10 años sufrió un accidente con un cable de electricidad y perdió ambos brazos, ahora es profesor de Taekwondo en la Universidad Sur Colombiana de Neiva y en esta ocasión vino a los Juegos Universitarios Nacionales Medellín 2018.
La historia de su accidente la cuenta y se ríe cada que puede… “Fui a cortar leña con mis hermanos y de camino vimos en una torre de electricidad un nido de pájaros. Iban unos pelaos mayores, pero el más hábil era yo. Subí 7 metros, las manos me dolían y lo único que vi para sostenerme era un cable, y al ver que el pajarito se paraba ahí y no le pasaba nada, yo agarré el cable y me quedé pegado”.
Así fue como Ancizar perdió ambos brazos, pero esto no fue impedimento para practicar Taekwondo.
“A los 6 meses del accidente fui de visita a donde unos primos que practicaban esta arte marcial y me invitaron a que fuera con ellos un día a la academia del maestro Germán Gutiérrez en Bogotá. Así fue como empecé. La primera vez que fui a una competencia, los rivales decían que les daba pesar pegarme y esa era la excusa cuando perdían”
Han pasado 43 años y ahora Ancizar comparte su conocimiento con otras generaciones, en esta ocasión trajo una delegación de 6 deportistas, 4 hombres y 2 mujeres. De ellos espera solo que sean buenas personas, la medalla de oro está en un segundo plano.
Sin comentarios